Hoy, más de 200 países y territorios están celebrando el Día de un Internet más seguro haciendo un llamamiento a las personas para que se unan y hagan de Internet un lugar más seguro y mejor para todos. Y si hay alguien que entiende la urgencia de trabajar por un Internet más seguro son los padres.
La Internet ha sido vital para ayudar a los padres a lograr un equilibrio entre el trabajo y la crianza de sus hijos a lo largo de una pandemia persistente. Sin embargo, es difícil ignorar los problemas sociales que son cada vez más amplificados en línea. Y con los niños aprendiendo y socializando cada vez más en línea, la realidad es que no siempre podemos estar allí para guiarlos.
Lo que es aún más aterrador es cuando las propuestas del gobierno socavan los mejores esfuerzos de las personas para mantener a los niños seguros en línea al ignorar una verdad simple: la seguridad es crucial para un Internet más seguro.
Puede parecer obvio, pero no lo es.
A pesar de sus mejores intenciones, la Ley de Seguridad en Internet del Reino Unido y la Ley de Eliminación de la Negligencia Abusiva y Desenfrenada de las Tecnologías Interactivas (EARN IT, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos son ejemplos de propuestas recientes que ponen en peligro la seguridad en Internet de prácticamente todos, incluidos los menores, al socavar nuestro escudo de seguridad digital más fuerte: el cifrado.
El cifrado es una tecnología de seguridad que desempeña un papel vital en nuestra vida diaria, sin embargo, la mayoría de nosotros lo damos por sentado. Es como la cerradura de la puerta que mantiene confidenciales nuestras comunicaciones y mantiene la información personal que compartimos con aquellos en quienes confiamos, como nuestros datos de ubicación, historial médico e información de identidad, fuera del alcance de los criminales.
Al igual que cerrar nuestras puertas ayuda a mantener nuestros hogares a salvo de amenazas externas, los expertos en Internet y las organizaciones de la sociedad civil de todo el mundo están de acuerdo en que no se pueden tener espacios seguros en línea sin cerraduras digitales fuertes como el cifrado.
Vamos a dedicar unos instantes a pensar en la relación entre la seguridad y la protección.
Según el diccionario de la RAE, seguridad significa «cualidad de seguro». Por otra parte, un Internet seguro es, según la descripción de Internet Society, un Internet «resistente a los ataques a su infraestructura, la cual es capaz de prestar un servicio sólido a su comunidad de usuarios».
¿Qué tiene que ver un concepto con el otro? El cifrado es fundamental porque actúa como un equipo de protección personal para el funcionamiento interno de Internet. Ayuda a garantizar la confidencialidad y autenticidad tanto de su arquitectura como de los miles de millones de interacciones diarias que se realizan en ella.
¿Cómo favorece esto la seguridad en Internet?
Una carta abierta de expertos en tecnología y grupos de la sociedad civil explica cómo privacidad que ofrece el cifrado también ayuda a que los menores y otras comunidades vulnerables sean «resistentes a los ataques» al protegerlos de posibles amenazas en la red. Por ejemplo, los periodistas, las comunidades LGTBI y los defensores de los derechos humanos confían en la protección que ofrece el cifrado para garantizar que tengan espacios seguros para trabajar e interactuar en la red.
Si los gobiernos del Reino Unido o de Estados Unidos lograran evitar que los usuarios y las empresas utilicen comunicaciones cifradas para garantizar la privacidad de sus vidas digitales, sería como prohibir que cierres la puerta de tu hogar.
Ningún adulto en su sano juicio aconsejaría a un niño que le abra la puerta a desconocidos. Entonces, ¿por qué un gobierno propondría una ley que permita que prácticamente todo lo que dices, compartes y haces en Internet pueda caer en manos de cualquiera que quiera acceder?
La única manera de avanzar hacia un Internet más seguro es acabar de raíz con el debate sobre el cifrado.
El pasado mes octubre, millones de personas y empresas de todo el mundo participaron en el primer Día Mundial del Cifrado para «hacer el cambio» a las comunicaciones cifradas.
Incluso el Gobierno de Canadá reconoció recientemente su contundente apoyo público a las comunicaciones cifradas en un informe de consulta de 2021 sobre su primer intento legislativo de abordar las amenazas en Internet.
Cuantos más gobiernos adopten esta base sólida, más rápido llegaremos a conversaciones productivas sobre soluciones del mundo real para garantizar la seguridad de las personas y de los menores en Internet.
Y en lugar de gastar fondos públicos promoviendo una mala legislación, los gobiernos deberían invertir en promover la educación y las prácticas de seguridad digital en nuestras escuelas y hogares y explorar la forma de abordar los problemas sociales antes de que se conviertan en problemas en Internet.
Al final y al cabo, todo depende de los adultos. Los padres y tutores legales son tan responsables de mantener a los niños seguros en nuestro mundo físico como en nuestro mundo digital. Enseñar a los niños de manera proactiva y sistemática cómo mantenerse seguros a medida que descubren ambos mundos, como la tecnología simple de las cerraduras de las puertas y el cifrado en Internet, puede ofrecerles una capa adicional de protección efectiva.
A continuación ofrecemos algunos recursos en Internet para promover un Internet más seguro: